El mundo se encuentra actualmente sumido en un proceso de reconversión del modo de producción. La tercera revolución industrial tiene como materia prima principal la información y el principal atributo de la fuerza laboral es el intelecto. Las nuevas TIC han reconvertido las maneras de generar valor y sólo una parte de la población mundial conoce cómo gestionarlas.
España en particular, además de ser partícipe de la globalización y de la revolución mencionada, está empezando a salir de una rigurosa crisis financiera y económica, que le ha llevado a ver cómo gran parte de su tejido empresarial ha sucumbido. La Administración no ha sabido prever esta situación y tampoco parece que haya ofrecido alternativas serias y con cierta diligencia a toda esa población que se ha encontrado “fuera de juego” por falta de demanda de sus servicios, por falta de financiación para sus proyectos y por ausencia de demanda de empleo.
Las tasas de desempleo en España alcanzan el 25% de la población activa, es decir, la cuarta parte de la población en edad de trabajar, no puede hacerlo.
La financiación (en paulatina mejoría) desapareció en España debido al “Credit Crounch”, dado que el sistema bancario, que conforma en España el 80% de la fuente de financiación a empresas, prefirió destinar su liquidez a depositarlo con remuneración, antes que a prestarlo con riesgo.
Las normas de juego en el ámbito empresarial han cambiado radicalmente. España ha dejado de producir (deslocalización) y la estrategia de su tejido empresarial está trasladándose a otro eslabón de la cadena de valor.
Estos cambios han provocado que gran parte de la población se encuentre en paro y gran parte de las empresas se encuentren en proceso de asimilar nuevos procesos que les permitan conquistar nuevos nichos.
Parece claro que la medida que más podría ayudar a gestionar esta situación de cambios profundos en España, sería la de propiciar un nuevo tejido empresarial capaz de generar valor en la economía española y de emplear la mano de obra ociosa. Si bien, la actual coyuntura no propicia que las empresa se aventuren a abordar nuevos proyectos y afrontar altos costes laborales que hipotequen su futuro. Más bien parece que es momento de que cada desempleado se reconvierta en empresa y pueda iniciar la búsqueda de su hueco en el mercado. Dada la actual coyuntura, parece la única salida para el desempleado.
No obstante, se hace tremendamente necesario que la Administración sea capaz de crear un marco institucional eficaz para generar un ecosistema propicio para, no solamente la creación de nuevas empresas, sino para que estas tengan considerables probabilidades de crecimiento y puedan pasar a engrosar el siguiente tramo del tejido empresarial, las PYMES.
Este semillero de emprendedores debe tener fácil acceso a la información, a la formación, a la financiación, a la viabilidad fiscal y laboral. Y todo esto es un deber que recae en la Administración, quien debe afrontarlo con valentía y decisión. Si las políticas gubernamentales han fracasado en un modelo empresarial y de empleo como el anterior, deben apostar de manera decidida por este otro, deben comunicar esta estrategia y deben informar y formar a la sociedad. Se conseguirían varios fines:
- Enfocar a la población demandante en detectar oportunidades.
- Generar valor económico y social a través de proyectos vertebradores.
- Reducir tasas de desempleo.
- Concienciar a la sociedad que es posible salir adelante con recursos propios, sin dependencias invalidantes.
- Reconvertir proyectos nacientes en futuras empresas contratantes y generadoras de riqueza.
Este último punto aportaría despertaría a la sociedad la sensación de autosuficiencia y sería el caldo de cultivo ideal que generara de manera perdurable un tejido de empresas incipientes capaces de vertebrar una sociedad en todos sus aspectos.
El entorno tiene un papel determinante en el panorama emprendedor. Para que una sociedad cuente con un ambiente propicio al emprendimiento se requiere un marco institucional que fomente la cultura emprendedora. Debe existir un ecosistema que haga de caldo de cultivo de este tipo de iniciativas.
INFORME GEM 2014:
El panel de expertos a los que el informe GEM 2014 ha preguntado, resuelve que los principales condicionantes que determinan el grado idoneidad de un entorno son los siguientes, enunciados en orden de peor a mejor calificación, según el panel de expertos consultados en relación a la situación del entorno emprendedor nacional:
Los condicionantes peor valorados:
- Educación y formación en etapa escolar: este factor tiene en cuenta el nivel en el que se forma a los escolares en el ámbito de la emprendeduría.
- Financiación para emprendedores: mide sobre todo el nivel de acceso a la financiación, sea del tipo que sea.
- Burocracia e impuestos: se trata del nivel de trabas administrativas, gestiones, impuestos, etc. que entorpecen el proceso emprendedor.
- Transferencia de I+D: Gado de facilitación de acceso a la tecnología.
- Barreras de acceso al mercado interno: grado de dificultad en acceder al mercado de interno. Sin duda influyen el nivel de empleo y el consumo.
- Políticas gubernamentales asociadas al apoyo: mide el nivel de iniciativas puestas en marcha por la Administración competente encaminadas a fomentar la actividad emprendedora.
Los condicionantes mejor valorados:
- Existencia y acceso a infraestructura física y de servicios: Aun siendo el condicionante mejor valorado, la tendencia es descendente en los últimos diez años. Mide el nivel de madurez en instalación y facilidad de acceso a la infraestructura de servicios que puedan dar servicio a estas iniciativas.
- Existencia y acceso a infraestructura comercial y profesional: en España se ha mejorado de manera considerable, es decir, la infraestructura de proveedores en cuanto a asesoramiento y servicios dirigidos a emprendedores es concurrida.
- Programas gubernamentales: cantidad y calidad de programas promovidos por la Administración encaminados a potenciar el mundo del emprendimiento.
- Dinámica del mercado interno: una vez en salvadas las barreras de entrada a la mercado interno, los niveles de dinamismo que presentan son aceptables, en principio gracias a la recuperación económica y aumento de los niveles de consumo.
- Normas sociales y culturales: Este aspecto tiene un carácter más bien estructural y mide el grado de creatividad y aversión al riesgo de la cultura del entorno analizado a la hora de enfrentarse a iniciativos emprendedoras. Tiene un componente claramente marcado por la cultura del país y en este campo poco puede empeorarlo o mejorarlo de manera considerable la Administración de turno, no siendo a muy largo plazo.
- Educación y formación emprendedora en época post escolar: se viene mejorando bastante en este tipo de iniciativas de formación de emprendedores. Las escuelas de negocios y de emprendedores han proliferado así como de concienciación y gestión emocional a la hora de abordar este tipo de iniciativas.
La valoración de los expertos es que España aún se encuentra por debajo de la media europea en todos factores del entorno emprendedor y que la distancia no está siendo recortada de manera determinante.
No obstante confirman que las normas sociales y culturales en España permiten una mayor facilidad para la gestión emprendedora motivada por una cultura creativa y costumbres imbricadas en nuestro entorno, aunque es cierto que se percibe que esta propensión a la iniciativa emprendedora decae moderadamente.
El análisis de los factores más estructurales no muestra grandes variaciones, tales como son las normas y costumbres sociales. Algo parecido le ocurre al acceso a la financiación, bastante deteriorado en la última década en la que se analizan ejercicios económicos de cierta estabilidad (periodo 2.005 a 2.009) y de crisis económica financiera (2.009-2014), presentando niveles de acceso a financiación baste mejorables para ambos periodos. La formación en época escolar muestra también niveles de estancamiento a lo largo del periodo analizado.
Sin embargo, en otros factores más coyunturales sí se ha visto un intento de leve mejoría como las políticas gubernamentales en general y la dinámica del mercado interno, así como la formación en época post escolar.
De todos los factores mencionados que influyen en la calidad del ecosistema emprendedor, el panel de expertos encuentra más relevantes algunos de ellos. Lo hace previo análisis de los principales obstáculos y apoyos que encuentran a la hora de relanzar un entorno propio.
Unas políticas gubernamentales que respalden claramente el ecosistema emprendedor y un acceso a la financiación son los principales obstáculos que encuentran en el entorno analizado.
Sin embargo, es la propia crisis económica y consecuentemente el estado del mercado laboral los principales apoyos que tiene el marco emprendedor. Gracias a este sombrío panorama, la Administración puso en práctica políticas encaminadas a que la iniciativa emprendedora supliera las carencias en el marco laboral y económico. La única salida real de los colectivos desempleados y más desfavorecidos está siendo el emprendimiento. Y lo está siendo a fuerza de emplear la creatividad y el ingenio al máximo, puesto que no existe financiación para ellos. En un momento de crisis financiera y económica en España, gran parte de la sociedad ha empleado sus escasos recursos propios para poner en marcha iniciativas de diversa índole, suponiendo una salida a su supervivencia y contribuyendo a dinamizar el entorno emprendedor.
La Administración ha percibido esta realidad y no le ha quedado muchas más alternativas que no sea la de poner en marcha con urgencia nuevas políticas gubernamentales que incentiven el marco emprendedor, a través de ayudas económicas, convenios y programas de apoyo financiero, etc., aunque es verdad que calificado por gran parte del sector como de “postureo”.
Con este análisis previo, los expertos creen que los factores realmente relevantes de este entorno son verdaderas políticas gubernamentales que resuelvan la problemática del apoyo financiero a los emprendedores, que fomenten la educación y formación desde los niveles iniciales escolares y resuelvan la grave problemática de los costes laborales.
Y además afirman que la manera de llevar a cabo estas medidas sea a través de acciones duraderas en el tiempo que reconviertan el entorno emprendedor en España desde la base y que la visión del anhelado punto de destino sea compartido por todos los “stakeholders” que componen el marco o el ecosistema emprendedor.
Solo así, se conseguirá mitigar en gran medida las causas de abandono prematuro del emprendedor en España, que son la falta de rentabilidad (ligada a la falta de formación) y los problemas de acceso a la financiación (ligado a la ausencia de alternativas a la clásica financiación bancaria).
FINANCIACION:
Hasta el inicio de la gran crisis financiera (2.008), en todos los mercados existía la liquidez necesaria para las transacciones habituales y la financiación no conformaba ningún problema para particulares ni empresas. Pero es a partir de la crisis financiera cuando los expertos dicen que “baja la marea y pilla a muchos sin bañador” y un ejemplo de esta fotografía es el sector bancario español. Los bancos se quedan sin liquidez, son sometidos a numerosos requerimientos de balance por parte del BCE y la única manera de financiarse es a través de esa liquidez que los bancos centrales ponían a disposición de la sociedad. Los bancos adquieren esa financiación y en lugar de prestarla a los clientes la ponen en depósitos para ser remunerados, negocio más rentable que prestar con incertidumbre. Se produce pues el famoso “Credit Crunch”.
Mientras que en países como EEUU, el sistema bancario proporciona el 20% de las necesidades financieras de las empresas, en España lo hace en un 80%. ¿Por qué? Porque en EEUU existen alternativas a la financiación bancaria. En España, sin embargo, no ha habido cultura de buscar financiación alternativa y ni siquiera existían instrumentos necesarios para facilitar por parte del gobierno estas fuentes de financiación.
Es entonces cuando el gobierno activa políticas de apoyo a la financiación de las PYMES. Se acuerda entonces de los agentes que funcionan en otros mercados, como son las empresas de “Capital Riesgo”, “Business Angels”, “Familly Office”, Fondos de Inversión, y mercados alternativos de deuda. Todos estos expertos “partners” de la financiación en otros entornos han sabido dar respaldo al 80% de las necesidades financieras de sus mercados.
En el 2013, el gobierno español puso en marcha el Mercado Alternativo de Renta Fija para PYMES como un gesto simpático aunque poco efectivo, dado que se esperaba que pudiera beneficiar a unas 1.000 empresas en toda España.
PROPUESTA:
Creo que el gobierno debiera confeccionar un “Libro blanco sobre financiación de emprendedores” y divulgarla a través de todas las asociaciones empresariales y escuelas de negocios y otra adaptada para el segmento escolar. En dicha guía se debería ofrecer consejos sobre las mejores prácticas de financiación en nuevos proyectos y cómo moverse en este mundo. Describir cada una de las figuras que ofrecen financiación en cada una de las fases del proyecto (Capital semilla, Business Angels, Familly Office, Fondos de Inversión, financiación bancaria y mercados alternativos de deuda) y ejemplos de emprendedores que han alcanzado el éxito y los que no lo hicieron, haciendo especial hincapié en el mérito de estos últimos.
Propiciaría colaboraciones público privadas entre los “stakeholders” del sector inversor y las asociaciones empresariales y escuelas de negocios de toda índole para potenciar la interacción mutua.
Soy poco partidario de las subvenciones porque creo que desvirtúa más que ayuda y creo que lo gratis no se aprecia. Soy más partidario de exenciones fiscales, que no deja de ser una fuente de financiación, no solamente ara el emprendedor sino también para el inversor que invierte su dinero en un proyecto asumiendo un riesgo. Esta medida dinamizaría considerablemente el sector inversor y pondría a disposición de nuevos proyectos grandes bolsas de capital.
Creo que sería muy conveniente la creación pública de un instrumento de capital privado, aunque cotutelado por la Administración, que captara fondos internacionales para la inversión en nuevos proyectos y articulara fórmulas de participación en proyectos empresariales a través de diversas fórmulas.
EMPRENDIMIENTO SOCIAL
Me ha llamado poderosamente la atención el nivel en España de emprendimiento social. La tasa de actividad empresarial social en etapa temprana en España se encentra a niveles de Cisjordania, Bosnia y Arabia Saudí, muy por debajo de países similares. Esta tasa está repartida de manera muy heterogénea en Europa, siendo los países latinos los que menor tasa presentamos y entre ellos, España presenta la más baja. Salvo excepciones, también en el panorama iberoamericano presentamos la peor tasa de actividad emprendedora social. El panel de expertos del Informe GEM no diserta sobre las posibles causas de estas tasas tan bajas, aunque sí indica que la tendencia es esperanzadora puesto que el 0,34% de la población se encuentra involucrada en este tipo de proyectos.
En cuanto a perfil del emprendedor social, el informe nos habla del prototipo: un hombre de 35 años y nivel medio de estudios. Aunque parece que estas características no marcan fronteras relevantes sí se podrían sacar alguna conclusión a la que me aventuro:
- En cuanto al género no parece que sea demasiado relevante aunque la propia maternidad en edad temprana considera que podría marcar levemente alguna diferencia.
- En cuanto a la edad, es significativo que el tramo de edad más activo comprenda el periodo en el que más madurez e independencia alcanza la persona.
- En cuanto al nivel de estudios, podría darse la lectura de que un nivel bajo de estudios lucha más bien por su supervivencia en trabajos más exigentes físicamente y los estudios de mayor nivel son mejor remunerados y conllevan por ende mayor implicación.
Podríamos segmentar el perfil también por tipo de emprendedor social, artesano o micro emprendedor, los construccionistas y los ingenieros. Sería muy interesante conocer el prototipo de cada uno de estos segmentos y podríamos hacernos una idea más coherente.
La misión de estos emprendedores es la generar valor social. Sus valores son distintos a los emprendedores de tipo económico ya que no buscan riqueza para sus empresas o para sí mismos sino que prefieren compartirlas con la sociedad. Pudieran tener unos principios más arraigados en cuanto a la justicia social y la solidaridad.
La idea de que no admitan un “no” como respuesta puede darse en todos los emprendedores con independencia de cuál sea su ámbito de actuación, pero sí parece que pudieran emplear mayores dosis de carácter a la hora de afrontar un “NO administrativo y legal” que un “NO del mercado empresarial”. “Plantar cara” a un marco administrativo convencional supone hacer cambiar de manera de pensar a una parte de la sociedad y eso tiene un gran componente de dificultad.
Un magnifico ejemplo de emprendimiento social que se dedica al cultivo de productos ecológicos, próximos y de calidad y que practica el social farming. Por la información disponible en la web, como en la de la Fundación matriz, parece que ha nacido a iniciativa de la Administración, que ha sido capaz de articular iniciativas públicos privadas que ha dado como fruto este tipo de empresas.
Con independencia del proceso de emprendimiento y del tipo de emprendedor, que creo que es clave, con respecto a la empresa destacaría la fórmula jurídica, sociedad cooperativa, tan poco empleada en el sector empresarial privado, que protege los intereses por igual de todos los socios cooperativistas.
Me parece fantástica la misión de la cooperativa: compromiso con la discapacidad y la marginación a través de la ecología como recurso principal. Y como argumento el de que tan solo la cuarta parte de la población con discapacidad es capaz de acceder al mercado laboral.
Un rasgo de la empresa que la confirma como emprendedora social es el reto que publican: reinventarse para formular propuestas solidarias y TRANSFORMAR LA SOCIEDAD. Algo tan ambicioso como transformar la sociedad y que pudiera parecer tan necesario y fácil, es una tarea que precisa unos altos ideales y disconformidad con la sociedad actual.
Todo ello basado en unos valores como la ética y la innovación, proximidad y dinamismo y cuyo rasgo diferencial sea la sostenibilidad económica, es decir retos muy considerables que requieren una gran voluntad y un carácter desafiante.
Es una cooperativa compuesta por la Red Agrosocial, compuesta a su ve por empresas comprometidas social y medioambientalmente, revalorizando el sector primario como garantía medioambiental y como principal fuente de salud y recuperación de la biodiversidad. Todo el proyecto pivota sobre la sostenibilidad, ya sea medioambiental, económica y social.
Por último, han sido capaces de involucrar en este proyecto a la iniciativa pública y privada, aunando lo mejor de ambos sectores. Participan incluso una red de “business angels” e inversores institucionales comprometidos por un crecimiento cohesionado de un país a través de unos valores nobles y sin anteponer el beneficio económico a la solidaridad e integración social.
En definitiva, supone una esperanza para la sociedad. Ha sido un placer y una satisfacción descubrir esta iniciativa. Es esperanzador, porque es un ejemplo idóneo de cómo conjugar los recursos que tenemos a nuestro alcance para crecer en una dirección tal que no nos dejemos a nada ni nadie por el camino.
Si todo esto hubiera nacido a iniciativa de una persona (por lo que he podido investigar no es así) este emprendedor sería un ingeniero social, capaz de transformar una sociedad a través de un emprendimiento.
Enhorabuena. Gracias por estar.
