El robo de El entierro del Conde de Orgaz

La historia del Ángel que rescató el alma del conde.

Se ha descubierto que la obra de El Greco, El entierro del conde de Orgaz, lleva desparecida varios meses, sin que nadie se haya percatado. Las razones de su desaparición, los poderes del momento, la decadencia actual de valores, son varios de los ingredientes de la obra. La historia de este robo se desarrolla en varios planos, al igual que los planos en los que se divide la obra de El Greco: El plano terrenal, desde donde la comprensión humana alcanza algo, el plano celestial, que representa una energía trascendental y eterna, y el plano intermedio por donde un Ángel trata de rescatar el Alma del Conde a través de un espacio angosto, el mismo por el que desapareció el cuadro, que permita perpetuar su Alma en el cielo. El resultado final de esta lucha es quizá impredecible o incomprensible.

Una batalla de valores, apoyada en la historia de un trascendental robo de la obra maestra de uno de los grandes artistas de la humanidad.

La historia de este robo se desarrolla en varios planos, al igual que los planos en los que se divide la obra de El Greco:

  1. El plano terrenal, comprensible para el ser humano.
  2. El plano celestial, que representa una energía trascendental y eterna.
  3. Y el plano intermedio, en el que normalmente ocurren las historias más interesantes y por donde un ángel trata de rescatar el alma del conde a través de un espacio angosto, de similares características al espacio por el que desapareció el cuadro. El resultado final de esta lucha es quizá impredecible o incomprensible.

Me inspiré en mucha gente mayor que he conocido a lo largo de mi vida y a los que no me canso de escuchar, en busca de ciertas claves, muchas de las cuales, se encuentran en el «manuscrito de la verdad». La gente mayor tiene una mirada y una fisionomía muy interesante, que cuenta muchas historias y son reflejo de su sabiduría. Mis cuatro abuelos son en gran medida muy culpables de esta obra.

La lectura de este relato también contribuirá a facilitar un acercamiento a la obra maestra de El Greco en el IV Centenario del fallecimiento del pintor. El Entierro del Conde de Orgaz es una pieza única, que recoge infinidad de datos históricos, cuyos personajes representados fueron en su mayoría personajes reales de varios momentos históricos. El cuadro es una macroproducción del momento, muy apropiada para contar una pequeña historia de alguien que surgió para recuperar algo más que un cuadro robado.

En definitiva, se trata de la historia de la reencarnación del ángel en alguien tremendamente conmovedor, cuya misión consiste, una vez más, en poner a buen recaudo el alma del templo.

Un buen día, la ciudad de Toledo se despierta sobresaltada por la desaparición de la obra maestra de El Greco. Pero lo más sorprendente es que lleva desaparecida unos meses y nadie se dio cuenta antes. Un paralelismo con los valores en la sociedad, que desaparecen sin darnos cuenta, de manera paulatina. Y son los ancianos los que actúan como detectores de estas fugas de valores, son las antenas que detectan estas ausencias y que encienden el piloto rojo a la sociedad, aunque la sociedad tilde sus denuncias de quejas y batallitas de mayores.

El final, quizá impredecible, sorprenderá al lector. La ciudad de Toledo cuenta con un atributo destacado, que es la marca personal que le ha acompañado a lo largo de la historia y no es otra que la de ciudad de la tolerancia, donde convivieron tres culturas (judíos, árabes y cristianos), circunstancia que provocó una riqueza cultural sin precedentes.

Estas tres culturas están representadas en la novela, mediante modos de pensar distintos y en cuyas fronteras de sus discursos, se encuentran las partes intermedias, los planos donde ocurren las cosas más interesantes, y por donde desaparecen y aparecen algunos símbolos. De igual manera, la Capilla donde se ubica la obra maestra de El Greco, simboliza la intersección física de tres poderes del momento. Una obra de casi 5 metros de altura por casi 4 de anchura, que parece imposible de hacer desaparecer, de igual manera que parece mentira que el ángel y el alma del conde puedan atravesar el útero que alumbrará el alma del conde al plano divino. Un alumbramiento que, desde el plano terrenal es asumido como una pérdida irremediable, circunstancia que corrobora que un mismo hecho, puede ser interpretado de manera totalmente distinta desde diferentes perspectivas.

El reto del ángel es devolver el alma al templo, haciendo ver a la sociedad los valores nobles del entendimiento.

Espero que disfrutéis de la lectura.