Día de entrevista. Hoy en RTV Diocesana. Me gustan las entrevistas. Tienen algo de revitalizante, regenerador mejor dicho. Cuando las preguntas son buenas y quien las realiza es la presentadora Teresa Martín, todo es mucho más agradable. De igual manera que las ventanas de su fabuloso estudio de radio se abren para contemplar la belleza de la ciudad, Teresa consigue con sus preguntas que se abran esas ventanas interiores para que una brisa fresca desprenda las telarañas que el tiempo va dibujando sin percatarnos. Aunque creo que soy demasiado transparente, tanto que a menudo hago spoiler de la novela que voy a presentar. En este caso «La cuarta semilla». Sigo mimando esta semilla que tanto me esta dando y confío en que sea el germen de un bosque.

A menudo me refiero a aquellas semillas que trajeron a la península ibérica los fenicios hace muchos siglos. Quién les iba a decir que aquellos huesos de aceituna, o esquejes se convertirían en la mayor producción mundial de aceite de oliva que hoy es España y cuyos árboles cubren unas extensiones donde la vista no alcanza a ver el final. Soy consciente de que llegará un momento en que «La cuarta semilla» crecerá sola y germinarán otras tantas, pero por el momento, sigo empeñado en que todo el mundo conozca la historia de una familia dueña de un sencillo olivar engendrado por una misteriosa encomienda. Y poder seguir ayudando con una humilde aportación a muchos niños y niñas en situación de vulnerabilidad (Aldeas Infantiles).
Seguimos.
